13/3/07
Despedida del actual Jefe DictadorEl pasado fin de semana tuvo lugar un magno acontecimiento: la despedida de soltero de nuestro bienamado Jefe Dictador, el Chanin. Tal acto se llevó a cabo en la monumental ciudad de Burgos, villa en la que no nos conocía nadie y en la que en algún bar tardarán (lo mismo no mucho pero un poquillo seguro que sí) en olvidarnos.
El sábado cerca de la una llegamos a Burgos dispuestos a bebernos hasta al alcalde si nos lo ponían en un vaso, dejamos nuestros enseres en un hotelazo que reservó el homenajeado y nos aplicamos a trasegar diversas bebidas espiritosas acompañadas de manjares de la tierra casi ininterrumpidamente hasta la hora de la cena. Hubo tiempo para alguna siesta y hasta para alguna partida de mus, por lo visto.
Endispués, ya notándose cierta pérdida de energía, cenamos una reconstituyente sopa de ajo, morcillas, choricitos, un buen cordero, postre... a tutiplén.
Ya cenados y sacando fuerzas de flaqueza empezamos la ruta nocturna de barra en barra. En este caso trasegamos bebidas más espiritosas todavía acompañadas de... hielo y, en algunos casos, una rodajica de limón. Y así se fue pasando la velada, canturreando, dando palmas, haciendo el ganso... y bailar y bailar.
Con el paso de las horas y cada uno según su capacidad de aguante y/o ganas de seguir machacándose el hígado nos fuimos batiendo en retirada cuando nos pareció bien. Pero creo que todos felices y contentos y con la satisfacción del deber cumplido.
Y esta es, a grandes rasgos, la crónica de tan insigne despedida. El sábado que viene: más. ¡Vivan los novios!
Deja aquí tu grito y lee los otros